domingo, 25 de mayo de 2014

Buen viaje


Parte la canoa 
que te lleva a tu ultimo destino.
Dos monedas para el barquero
alegoricamente iluminan tus ojos cerrados,
y envuelto en las finas sedas de ribetes y puntillas
como alas de arcangel  abrazan tu cuerpo
cansado de tanto recorrido.
Buen viaje buen amigo, padre, esposo,
y tantos otros atributos que enaltecen
tu paso por la tierra y por nosotros.
Buen viaje.

martes, 6 de mayo de 2014

La casa de Lugano








La ventana del living daba a un pequeño jardín que teníamos en la casa de Villa Lugano. Prolijamente arreglado por mi hermana Paula que le dedicaba prácticamente todo su tiempo. Aunque venia el jardinero una vez por mes, a ella le gustaba trabajar la tierra y acomodar las plantas dándole su toque personal
El jardín tenía un hermoso cordón de flores, de variados colores, que bordeaba en forma de corazón a nuestro árbol de mandarinas.
Me quede observándolo  a través del vidrio casi empañado, en esa tarde plomiza y lluviosa de Mayo.
Con la mirada perdida por el recuerdo de otras épocas, no me percate que habían venido a colocar el cartel de la inmobiliaria. Los martillazos sobre  el frente de la casa retumbaban en mi cabeza, tan fuertes y tan profundos que repercutían en los latidos de mi corazón.
Aquella casa había sido el cofre de nuestros tesoros que albergo nuestra niñez, que fue testigo de todas nuestras travesuras y desdenes, que compartió con nosotros risas y llantos, alegrías y tristezas, como aquella vez en que murió nuestro amado perrito Titi. El pobre se atraganto con un hueso que no le pudimos sacar de la garganta. Era un hermoso weimaraner de color gris amorronado, criado como si  fuera un hijo más, y no estaba acostumbrado a comer huesos. Esa noche había venido el tío Enrique con la tía Maruja y nuestros primos y primas a comer un asado que ofrecía nuestro padre. El tío ostentaba gran sabiduría en cuestiones perrunas pero no había visto nunca a nuestra mascota, y mientras Titi se paseaba por debajo de la mesa como lo hacía siempre, el tío le dio la primera dotación de huesos de su vida. Creemos que murió de desesperación. Lo encontramos detrás del árbol de mandarinas   con sus ojos y su boca abiertos. Como tratando de gritar para avisarnos.  Ahí era donde él solía esconderse para jugar con nosotros. Era su lugar preferido de siempre.
Papa se enojo mucho con el tío y no lo quiso ver más. El tío enrique estaba desolado. Paula y yo no lo juzgamos porque el tío Enrique era bueno y siempre se acordaba de nosotros pero no sabía que Titi era delicado para comer. Con el tiempo, cuando papa lo perdonó,  nos regalo un cachorro de Golden Retriever y también nos encariñamos con él, pero nunca olvidamos a Titi.
El momento feliz más emotivo que recuerdo fue cuando Paula cumplió los quince. Hicimos la fiesta en el fondo parquizado. Papa había hecho iluminar todo el parque y las mesas estaban por doquier. Fue la fiesta más hermosa que viví en mi vida y Paula lucia resplandeciente. Tenía un vestido blanco como si fuera una novia, y sus compañeros y amigos del colegio habían venido todos vestidos de frac. Después de papá, Paula me eligió para bailar el vals. Estaba emocionado y no pude resistir algunas lágrimas  que mojaron mi solapa. Amaba a mi hermana y su felicidad era la mía.
Cuando se fueron los empleados de la inmobiliaria recorrí la casa por última vez. Me impregne del olor de las maderas, del perfume hogareño que aun persistía a través de los años. Miré el parque con césped alto y montañas de hojas amarillentas que el otoño dejaba a su paso. Hasta pude sentir el rechinar de las maderas del piso superior cuando Paula o mama caminaban con sus tacones y mi corazón grabo ese cuadro. Quería conservar la mansedumbre de mi niñez, la felicidad de mi familia en ese periodo tan hermoso  y sumarlo a la melancolía que viviría conmigo por el resto de mi vida.

Alejandro Luna

Nigth Club Karim´s

Club Karim No me podía concentrar aquella noche lluviosa. Aunque trataba de olvidar los hechos acaecidos unas horas atrás, no lograba p...